A veces nos sentimos como el humo de un
cigarrillo como algo que llega y se pierde en el monocromo mundo de
ignorancias e hipocresías, nos sentimos como la peor cosa, por
pensamientos egoístas, masoquistas. Para que existir, para que vivir,
para que sufrir, este universo esta lleno de dolores, angustias; para
vivir el 10% de felicidad debes sufrir el 90%, es incoherente, es
inhumano, somos y existimos para sufrir, y aun así, nos preocupamos por
estupideces, cosas que si las piensas profundamente te arrepentirías.
Dulce
pensamiento infantil, dulce mundo falso, dichoso el ignorante que viven
en el, si todo el mundo comprendiera la realidad en vez de suplicar por
estar vivos,suplicaríamos por morir, por descansar en la felicidad de
la nada.
Desesperados estuvimos cuando comenzamos a entender
involuntariamente la realidad, y como cobardes que somos por naturaleza,
inventamos estupideces para hacernos mas imbéciles de lo que somos, a
consecuencia creamos cosas que nos causan mas dolor, una mente
desesperada y abrumada con poca inteligencia y naturaleza masoquista no
acaba en mas que una tragedia involuntaria.
El deseo de aferrarnos
a algo para sobrevivir y luego entender que es una falsedad, el deseo
de tener alguien a tu lado para ser feliz, el deseo de tener cosas a tu
alrededor para ser feliz, el deseo de sobresalir y aparentar ser
diferentes cuando realmente somos la misma asquerosidad, el deseo de
nadar en papeles para demostrar tu poder cuando realmente eres mas débil
que las cenizas de una pluma al quemarse, entre muchos mas deseos
masoquistas que voluntariamente aplicamos en nuestras vidas, ¿Para que?.
Alguien
inteligente debe saber que nada es para siempre y todo se gasta, todo
tiene su principio y su fin, todo lo que en el hoy comienza en el mañana
acaba, todo lo que hoy veas mañana no veras, todo lo que hoy huelas
mañana no olerás, todo lo que hoy sientas mañana no lo sentirás, todo lo
que ames mañana no lo amaras, al menos de la misma forma que ayer lo
hiciste.
Y en este momento a mi, me atrapa todo esto y me encierra
en un profundo mundo entre sombras y colores oscuros, sin poder escapar
de ello, solo me aferro a las promesas, si te incumplí lo que te
prometí, no moriré, viviré, viviré para sufrir.
Para eso es esta
vida para sufrir, pero te cumpliré un pequeño deseo masoquista que
involuntariamente todos los seres humanos aunque algunos no lo acepten,
lo sienten, al menos te daré un 1% de felicidad, quizás no sea mucho
pero ese será mi propósito, el propósito por el que sigo de pie,de pie a
tu lado, para estar junto a ti, en el sufrimiento y en la poca
felicidad.
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